Los Ewing viendo a Extremoduro

Buenas a todos.

Al fin tengo 5 minutos libres para resumir este fin de semana:

Salida fulburante el viernes a las 7 de la tarde destino Pucela con la Metaleta llena de kilos gracias a nuestro equipo Champions League para la ocasión: Papis, Willy, Cuervo(colega del equipo de basket) y servidor.

Llegada al hostal de Pucela: hostal tipo La Marranina con bar estelar a su lado(Bar La Acequia II) donde nos tomamos cada uno 7 birras antes de que llegasen los Avilewings.

Esta noche se puede resumir en lo siguiente: conversación en modo cavernícola con una bella dama a una hora indeterminada:

Alguien de nosotros: "Bueno, ¿y a qué te dedicas?"
Chica(con voz en plan Chipo de resaca): "soy arquitecta"
Voz en off de alguno de nosotros: "Comenabosssssssssssssssss"

Fin de la conversación.

Dos horitas dormidas y p´arriba! Jose tiene la brillante idea de ir a las casetas regionales del estadio. Nada más llegar aparecemos sin querer en la caseta de Ávila. Gracias a una acción conjunta entre el Papis y yo mismo nos pedimos unos "murallitos" sin saber lo que eran. Pues resulta que eran una especie de hornazos de Salamanca superempalagosos, hasta tal punto que los definimos como "polvorones de arena".

Sidras, gritos a la jamona del canal Castilla y León("cómo te botan!!!!!"), bailoteo, fotos sin cámara, etc... y pa Palencia. En el viaje Jose nos dejó el nuevo cd de Extremoduro para que los de Burgos oyésemos el cd antes de ir al concierto. A la cuarta canción ya estábamos todos hasta los whevos, cuando de repente sonaron unas trompetas en plan mariachi, con lo que el Papis tiró el cd por la ventana y pusimos un poco de Savatage para amenizar el viaje cantando Chance.

Compramos vino Hermanos_Rubio_cómo_os_queremos, y localizamos el hotel dónde nos quedábamos. Vimos a Contador ganar en el Angliru, e hicimos botellón en nuestro cuarto(en donde sobábamos Papis y servidor), quedando por lo tanto la habitación como un solar. Llegó el resto del Comando Ávila con Chipo aún con pantalones, y nos fuimos al concierto, en donde tras la primera canción nos partimos el culo al ver al cantante totalmente pálido que parecía que lo habían sacado del Museo de Cera.

Bueno, lo pasamos bien y nos fuimos de bares, ya un poco cansadetes.

En un bar le digo a Chipo, tras ver que sus pantalones se parecían a otros que jodió en nuestro último concierto:

Yo: "Coño, te has traido los pantacas con el agujero en los whevos"
Chipo: "no, no son estos, pero ahora que lo dices tb he jodido estos"

Cosas sin importancia hasta el mensaje de Javi Merino(colega del curro del Papis) a las 8 de la mañana: "La Cepa(bar para comer tortillas a las 8 de la mañana) cierra del 15 al 30. Stop. Estoy pelando patatas dentro de la cocina. Stop."

Pasamos el día por Palencia, vimos que tiene menos vida que Ávila de largo, con lo que los Avilewings estaban encantados, Chipo acabó de destrozar los pantalones, cada uno a su casa y dios a la de ninguno, y ale, fin de la crónica.